Haciendo balance me doy cuenta de que las cosas han cambiado demasiado, casi todo para bien...
Aún así he perdido a mucha gente, he ganado a muchos otros, pero de nada de lo que he hecho me arrepiento.
Siempre he tenido alguien que me ayude, tanto en los momentos malos como en los buenos, y puedo decir que no ha estado nada mal, que las cosas vienen así y hay que aceptarlas, y que el destino lo escribimos nosotros.
He querido a muchas personas este año, también he odiado a muchas, pero con todas ellas he vivido experiencias, de esas que te enseñan y te hacen ser quien eres, de esas con las que aprendes a no repetir errores y a no dejar que te machaquen, por mucho que el resto se empeñe en hacerlo...
Así que, con todo, me duele acabar un año, y pensar que cada vez me queda menos vida que disfrutar con vosotros, pero aún así, es un placer compartirla con la gente maravillosa que me rodea, la que te hace tener esperanzas y ganas de vivir.
Feliz año a todos, afrontadlo con un buen par, no os dejéis pisotear nunca y no tengáis miedo de expresar vuestra opinión, ni de decir a la gente lo que sentís sin miedo a lo que pueda pasar, sed valientes, que la vida son dos días y de vosotros depende disfrutarla al máximo o ser simples observadores.
PD: por favor, perdonadme la sensiblería, pero me he desahogado muy agustico.
Me gusta mucho esta entrada =) Creo que entro entre los nuevos que has conocido =D
ResponderEliminarclaro, eres un buen muchacho ;) XDD
ResponderEliminar